Existen dos tipos de hombres de ciencia, los “inmovilistas” que consideran que las leyes de la física no pueden transgredirse y que las leyes de la naturaleza son todas conocidas y los “visionarios” que saben que todo es posible, que siempre puede haber algo más allá, una ley que vulnerar o una frontera que cruzar.
¿Porqué hoy día sólo los inventos y avances técnicos se disparan en tecnología de aparatos informáticos, teléfonos móviles y sin embargo vivimos con una energía obsoleta, vieja, contaminante y sin visibles adelantos a favor del ser humano?
¿Porqué las patentes de inventos eficaces, novedosos y casi gratuitos son rápidamente compradas, nadie sabe por quién y guardadas en los cajones del olvido?
¿Ha existido en la historia de nuestra humanidad alguien que hubiera hecho posible el sueño del ser humano en obtener energía libre y gratuita?
Preguntas que tienen respuesta y una realidad tenebrosa que hoy día persiste como una gran mano negra que se extiende hasta en las raíces más profundas de una sociedad que calla y consiente.
Nikola
Tesla nació el 10 de julio de 1856 en un pequeño pueblo llamado Smiljan
(Croacia). Su padre fue un sacerdote ortodoxo. Estudió en Gratz y Viena y
terminó su educación en París.
Este físico
serbo-norteamericano trabajó desde 1884 como asistente de Thomas Edison, que le hacía trabajar 18 horas al día
los siete días de la semana, solucionando los problemas técnicos que se
le presentaban Tesla describió cómo podía mejorar el efecto del generador
de Edison, éste respondió: “Le daré 500
dólares si usted logra hacerlo”.
Tras varios meses de trabajo Nikola lo logró. Edison, negándole el dinero prometido, dijo: “Tesla, usted no entiende el sentido del humor de los norteamericanos”. Ante ello, Tesla se despidió. Edison envidiaba el gran cerebro de Tesla y su arma era la humillación.
Comenzó a trabajar entonces en la construcción y más tarde creó su propio laboratorio. Pero los monopolistas de la energía tenían mucho poder y nadie quería cambios. Tesla decía que podía transmitir noticias y energía sin usar alambres, pero los magnates banqueros (¿os suena?) ya habían comprado las minas de cobre para cubrir gran parte del país con redes de cables para la distribución de la energía, era evidente que esta fabulosa inversión no podía perderse y harían todo lo que fuera necesario para evitarlo.
Tesla
siguió desarrollando la transmisión de energía gratuita por todo el mundo en el
laboratorio que construyó en 1889 en las montañas de Colorado Springs. Creó
una torre de alta tensión para demostrar el transporte de energía sin cable y
gratuito y al pedir más dinero para seguir con las investigaciones, se lo
denegaron con intención premeditada.
El
proyecto “Wardenclyffe”, así llamado, tuvo que ser abandonado por falta de
presupuesto y su torre destruida.
En 1891, ya había inventado una buena cantidad de dispositivos de gran utilidad. Tesla en una rueda de prensa anunció un motor de rayos cósmicos. Cuando se le preguntó si era más poderoso que el radiómetro Crooke, él contestó, “miles de veces más poderoso”.
También 1891 patentó lo que un día podría convertirse en su más famosa invención: la base para la transmisión inalámbrica de corriente eléctrica, conocido como la Bobina Transformadora Tesla.
Tesla estaba fascinado por la energía radiante y su posibilidad de convertirse en energía libre y gratuita, posiblemente ahí estuvo su gran error. Sabía que era posible tomar energía directamente “conectándose a la verdadera fuerza de la naturaleza”.
La nave Tierra, “necesitaba un plan de vuelo moderno”, decía Tesla. Tesla quería ayudar a las naciones menos privilegiadas. Sabía, y no ha cambiado nada, que miles de personas mueren de hambre al día, muchos de ellos niños.
La energía dirige y dirigirá siempre si no lo cambiamos, la economía de las naciones. La meta en la vida de este gran científico, fue hacer la energía eléctrica igualmente accesible y disponible para todas las personas en cualquier lugar del planeta y este empecinamiento le hundió, le señaló, comenzó a ser una amenaza para los lobbys energéticos y financieros.
A partir de
este momento fue objeto de ataques personales con la única intención de
desacreditarlo ante la opinión pública y la comunidad científica internacional.
A pesar de ello siguió trabajando y luchando contra todas las adversidades para
lograr su objetivo, llevar la energía libre a todos los rincones del planeta.
“….A lo largo del universo hay energía:
¿es esta estática o cinética?
En el primer caso nuestras esperanzas son vanas,
en el segundo –y esto lo sabemos con certeza- no es más
que cuestión de tiempo que los hombres tengan éxito
en sincronizar su maquinaria con los engranajes
mismos de la naturaleza”
NIKOLA TESLA
Nikola buscaba que sus inventos ayudaran a la humanidad por encima de cualquier premio o reconocimiento, incluso económico; lo que en aquella época y mucho menos hoy día, ningún científico o inventor estaría dispuesto a ofrecer a la sociedad. Y éste y no otro, fue su error. Su corazón era tan grande como su inteligencia y sus inventos. Muchos de ellos fueron olvidados por la pobreza en que vivió la última etapa en la vida.
Cabe señalar, y quizás esto le sorprenda enormemente que cuando Tesla llegó a EE.UU. llevaba bajo el brazo entre otros muchos documentos los planos para la construcción del primer Platillo Volador del mundo, que volaba sin necesidad de energía externa (recuerde que los hermanos Wright volaron por primera vez en diciembre de 1903 con un fragil aeroplano hecho de palos y tela con un rudimentario motor de 19cv). Tenía intención de presentarlos en la convención de Ginebra como solución para lograr la paz mundial y para la liberación de la Energía. Tenía fantásticas teorías sobre el magnetismo y la anti gravedad, así como sobre otras formas de “energía libre“. La tecnología de la autopropulsión, inventada por Tesla, fue la base de las naves espaciales tripuladas que hoy llamamos “platillos volantes“. Pero el gobierno de los Estados Unidos nunca dio a Tesla la oportunidad de poner en práctica todos sus hallazgos. Sin embargo, se dice que aquellas invenciones de Tesla fueron utilizadas por la Alemania Nazi en sus ” Foo Fighters” entre 1920-30 y posteriormente en ingenios mucho más avanzados, los prototipos Haunebu y Vril.
En 1901 Marconi envió su famosa radio señal diciendo haber inventado la radio. Pero utilizó 17 patentes de Tesla y la Corte Suprema corrigió el error en 1943 después de la muerte de Tesla. A pesar de este veredicto, la historia se ha encargado de borrar a este gran hombre que trabajaba para la humanidad y no para su propio beneficio o el de unos pocos.
En
1934 Tesla fue entrevistado en “The Times” y dijo: “Espero
vivir el tiempo suficiente hasta ser capaz de colocar un aparato en esta
habitación que se ponga en marcha con la energía de los medios que se mueven
alrededor”.
Nikola
era un hombre lleno de contrariedades, serio y reservado, pero también
encantador. Aunque era solitario, sabía atraer a la gente que le rodeaba.
Delgado y alto, siempre vestido perfectamente, con su postura aristocrática y
con elegancia, llamaba la atención.
Dos hechos importantes hicieron caer sobre él todo el peso de la ignorancia: Su negativa a enviar cualquier artículo a la comunidad académica haciendo que ésta se opusiera a todos sus inventos por magníficos que fueran; y su constante preocupación por obtener una energía libre y gratuita para todo el mundo, algo que lógicamente los amos y señores del poder económico no estaban dispuestos a permitir en un mundo ya canalizado para ser explotado sólo por ellos.
La situación no ha cambiado hoy día. Las multinacionales no permiten que se conozca o que se ponga en práctica la obra de Tesla. Cometerían un suicidio si los inventos de este gran hombre se fabricaran.
Entre sus logros figuran la invención de la radio, el motor de corriente alterna, luchaba por la investigación de un estándar eléctrico, la lámpara de pastilla de carbono (luz de alta frecuencia), el microscopio electrónico, un avión despegue y aterrizaje vertical, la resonancia, el radar, el submarino eléctrico, la bobina de Tesla, el rayo de la muerte, el control remoto, Rayos X, métodos y herramientas para el control climático, transmisión de video e imágenes por métodos inalámbricos, transferencia inalámbrica de energía, sistemas de propulsión por medios electromagnéticos (son necesidad de partes móviles), extracción de energía en grandes cantidades desde cualquier punto de la Tierra, etc.
Murió a los 86 años. Sus inventos y teorías fueron olvidados a conciencia. ¿Porqué? ¿Qué ocurrió en realidad? ¿Quién quiso que sus inventos cayeran en el olvido?. Sus grandes inventos de los diez últimos años fueron olvidados y, deliberadamente, se hizo que se le recordara por su excentricidad.
Murió solo, olvidado, abandonado, como todos los grandes sabios de la historia de la humanidad, en la habitación de su hotel. Fue encontrado por una limpiadora al día siguiente.
Ese mismo día, en plena Segunda Guerra Mundial, el FBI se encargó de requisar todos sus materiales, cajas, cuadernos de notas,… creándose el Informe Tesla y realizando registros en aquellos lugares donde Nikola Tesla pudiera tener anotaciones o referencias de sus inventos.
Hoy día, todo su trabajo sigue bajo secreto de estado. ¿Por qué? ¿De que tienen miedo? ¿Poseen el secreto de la energía libre y gratuita inventada por Tesla y no es conveniente que caiga en manos de la sociedad porque se rompería todo el esquema económico que nos han impuesto las multinacionales y el poder económico?, ¿Por qué nunca se han materializado los tan recomendados dispositivos de energía libre descritos por Tom Bearden, John Bedini, Bruce Desalma y otros?, ¿Por qué han desaparecido misteriosamente los motores electromagnéticos, de agua-hidrógeno, aire comprimido, etc…?
Nuevamente el gobierno invisible, aquél al que yo llamo “El Circus”, ése que está detrás del real, que amaña la sociedad y la somete bajo su capricho, ha realizado un fenomenal trabajo con Nikola Tesla, borrándolo de la historia, encargándose de que fuera tachado de excéntrico y loco, llevándole a la ruina y la muerte en el olvido. Son muchas, quizás demasiadas las preguntas que “La Doctrina Imperfecta” ha realizado en este artículo, no obstante, todas y cada una de ellas son imprescindibles si queremos conocer… la verdad.
Ésta es su historia, su legado, su vida, su realidad y cómo fue hundido por querer dar al mundo un nivel de vida que hoy no goza. Muchos datos, anécdotas, revelaciones y experimentos han quedado sin relatar. Deberá ser ud. quien, si le parece interesante, busque en la red una mayor información sobre este genio.
Debemos sacarle del olvido. Debió de ser considerado el mayor científico y el mejor inventor de la historia. Ponerle en el lugar que merece en la historia científica de la humanidad y exigir que sus descubrimientos dejen de estar secuestrados y se pongan al servicio del progreso mundial, ahora más que nunca.
Fdo.
La
Doctrina Imperfecta